En los últimos años, la legislación aplicable a las administraciones locales ha impuesto obligaciones adicionales de remisión de información al Ministerio, incrementando de forma exponencial el volumen de trabajo y los controles presupuestarios a implementar por parte de la intervención municipal. Los cálculos y criterios aplicables han añadido confusión y han propiciado errores y retrasos en la remisión de documentación en muchos ayuntamientos.
La Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Estabilidad Financiera (LOEPSF) es un claro ejemplo de esta situación, ya que ha supuesto un mayor nivel de complejidad en la gestión presupuestaria, en especial en lo que se refiere al cumplimiento de los objetivos en ella establecidos (estabilidad presupuestaria, techo de gasto y deuda pública). La complejidad se aplica también a los cálculos a realizar para estimarlos y para determinar cuál ha de ser el destino del superávit obtenido y del remanente de tesorería para gastos generales.
Para arrojar un poco de luz y apoyar el trabajo de los habilitados, y en base a la experiencia práctica en diversos entes locales, CGI ha elaborado una breve Nota Técnica informativa, en la que se detallan los conceptos básicos, la normativa aplicable y los criterios de estimación del Techo del Gasto y de Aplicación del Superávit. Aunque útil, puede no ser suficiente para la Intervención municipal, a menudo saturada en su trabajo diario y sin un conocimiento especializado suficiente en la materia. Ante esta situación es recomendable un soporte externo especializado que facilite el trabajo a realizar por la Intervención Municipal, de forma que pueda compartir y aclarar dudas, así como debatir sobre cómo aplicar esta normativa en la realidad específica de sus cuentas municipales.